Es una estrategia de identidad que abarca todo el Municipio Guaicaipuro, la cual busca ser el hilo conductor entre la cultura, las tradiciones, la historia y lo afirmativo guaicaipureño, que tiene como objetivo no solo fomentar el turismo local a nivel regional y nacional en sitios emblemáticos que posee el municipio, sino crear sentido de pertenencia, lo cual lograra el afianzamiento de la autoestima en las y los guaicaipureños para ir al encuentro de lo nuestro, de lo propio, lo que nos identifica como municipio y dar a conocer en otras latitudes las bellezas que posee estas tierras del Gran Cacique Guaicaipuro.
Petroglifo
La palabra petroglifo deriva del griego: pétra que significa piedra y glýphein que significa tallar, grabar o cincelar. El término se acuñó originalmente en francés, pétroglyphe. Los petroglifos son también llamados grabados rupestres. En lo que comprende el actual Municipio Guaicaipuro se encuentran una gran cantidad de petroglifos que datan de los tiempos de la tribu teques y caracas que habitaban esta zona.
A pesar que estos grabados no tienen una interpretación definida, en Los Teques, se encuentra dos grandes piedras en pleno centro comercial de la ciudad que documentan según la tradición oral y el cronista silvestre, Salvador Chito Aguilar, una de las tantas batallas de resistencia de nuestros indígenas ante el español invasor. En dichas piedras reposan varios petroglifos que son el mayor acervo histórico y cultural que tenemos como municipio.
Eche
Soy Tequeño
Atributos del Municipio Guaicaipuro
Un paso gigante para los tequeños y un salto histórico para Los Teques
Vamos a romper un record mundial y dejaremos claro definitivamente de que El Tequeño es de Los Teques!
Este 21 de octubre acompañamos que haremos historia…
Miranda Un gran estado
Miranda es uno de los 23 estados que junto al Distrito Capital, los territorios y dependencias federales conforman la República Bolivariana de Venezuela. Está ubicado en la región centronorte del país y limita al norte con el estado Vargas, Distrito Capital y el mar Caribe; al este con el estado Anzoátegui, al sur con Guárico y al suroeste con Aragua.
De acuerdo con el censo de 2001 es el segundo estado más poblado de la República con 2 millones 675 mil 165 habitantes y tiene una extensión de 7.950 Km2.
La región que hoy ocupa este estado fue ocupada hasta la llegada de los conquistadores españoles por diversas comunidades Caribes, entre estas Caracas, Teques, Cumanagotos, Mariches y Quiriquires, quienes defendieron aguerridamente sus tierras del invasor al mando de caciques como Guaicaipuro y Yare.
En la época colonial la región formó junto a otros estados parte de la Provincia de Caracas, posteriormente conformó el estado Guzmán Blanco para ser renombrado con la modificación territorial de 1889 como estado Miranda, en honor al Precursor de nuestra independencia.
En el año 1900, durante el gobierno de Cipriano Castro el hoy Distrito Capital se une al estado siendo la ciudad de Santa Lucía su capital provisional. Luego en 1901 la capital pasa a ser Petare y en 1904 es trasladada a Ocumare del Tuy.
En 1909 Ocumare del Tuy pasa a ser brevemente la capital del estado, pero luego se decide cambiar de forma definitiva la capital a Los Teques.
¡Eche! Soy tequeño
Nuestra marca ciudad, ¡Eche! Soy Tequeño Los Teques, 2023. Es un logotipo creado con el objetivo declarado de promover la identidad de una ciudad donde nació el pasapalo más conocido de Venezuela, también de cara al público de los turistas, y no cabe duda de que hoy es el gentilicio más conocido e icónico de todos.
¡Eche! Soy Tequeño Los Teques, 2023 no es solo una marca sino la identidad, un estilo y una impronta única que dará tradición y singularidad. A lo largo de la historia ha existido una competición entre ciudades que han buscado posicionarse respecto a las demás, por esto ahora nace la Marca – Ciudad, siguiendo los lineamientos de la marca pais Venezuela:Abierta al futuro, con el objetivo de engrandecer su territorio, población, economía y cultura, creando una identidad de ciudad que sea perceptible para el público objetivo.
«Tradición, amor y origen» son las características que quiere resaltar la nueva identidad de la marca ciudad, junto a un aspecto «alegre, sencillo y multicolor».
Aunque parece que la gestación del proyecto gráfico fue más compleja y enreversada de lo que se suele creer, a descripción de los petroglifos asociados a la tribu Teke, es un comependio de historias que se han enraizado con relatos populares con diversos significados, pero no existe un unico registro valido. La marca ciudad debe ayudar a la ciudad a reposicionarse en diversos planos: cultural, social, económico, turístico, social y productivo.
La mayoría de las veces, estos planos tienen como función la proyección internacional; sin embargo, lo más importante es desde una visión integradora e intercultural, constituyéndose así una marca ciudad que realmente traduce la identidad con un objetivo desde y para sus ciudadanos; que muestra en los petroglifos de la tribu el registro histórico de los origenes y desde esta visión integradora, pueda entonces ser transferida a diversos campos e intereses para asi enriquecer la vida cotidiana de los ciudadanos.
La marca ciudad viene a reconstruir y edificar lo que fue resultado de las malas decisiones y fallidas implementaciones de estos proyectos se traducen en ciudades en descomposición, sin identidad. Identidad que se muestra desfigurada, fragmentada y algunas veces, débil e incongruente con la riqueza cultural de cada pueblo. Es por eso que desde el punto de vista gráfico, quizás cabe señalar que la sencillez por la que se distingue el logo no es más que aparente:
en realidad, en él podemos observar lenguajes diferentes, condensados en una sola identidad visual asociada a la lucha histórica y creencias de los pueblos originarios.
¡Eche! Soy Tequeño Los Teques, 2023 es una estrategia de identidad que abarca todo el municipio Guaicaipuro, donde se busca ser el hilo conductor entre la cultura, las tradiciones, la historia y lo afirmativo guaicaipureño, que tiene como objetivo no solo fomentar el turismo local a nivel regional y nacional en sitios emblemáticos que posee el municipio, sino crear sentido de pertenencia, lo cual lograra el afianzamiento de la estima de la ciudad, de su historia y del gentilicio de las y los guaicaipureños para ir al encuentro de lo nuestro, de lo propio, lo que nos identifica como municipio y dar a conocer en otras latitudes las bellezas que posee estas tierras del Gran Cacique Guaicaipuro.
La marca ciudad se inspira y toma como propia los petroglifos asociados a la tribu teke.
¡Eche!
Es una Interjección, que en Los Teques se usa en sentido de exhortación, de alentar, animar, si como reflejar enojo o expresar protesta hacia situaciones puntuales. El ¡Eche! es lo más tequeño que tiene su gente, es una partícula discursiva que conduce nuestros gestos y emociones.
Soy Tequeño
Es la afirmación indiscutible de nuestro gentilicio, de la apropiación cultural, histórica y gastronómica que se conjugan en el ser tequeño.
La palabra petroglifo deriva del griego: pétra que significa piedra y glýphein que significa tallar, grabar o cincelar. El término se acuñó originalmente en francés, pétroglyphe. Los petroglifos son también llamados grabados rupestres. En lo que comprende el actual Municipio Guaicaipuro se encuentran una gran cantidad de petroglifos que datan de los tiempos de la tribu teques y caracas que habitaban esta zona.
A pesar que estos grabados no tienen una interpretación definida, en Los Teques, se encuentra dos grandes piedras en pleno centro comercial de la ciudad que documentan según la tradición oral y el cronista silvestre, Salvador Chito Aguilar, una de las tantas batallas de resistencia de nuestros indígenas ante el español invasor. En dichas piedras reposan varios petroglifos que son el mayor acervo histórico y cultural que tenemos como municipio.
Según interpretación locales y partiendo del misticismo propio de las montañas que se encuentran y se unen en los Altos Mirandinos, este grabado representa una profecía que indica el Regreso del Sol. Cuentan que este petroglifo es el único rostro del Gran Cacique Guaicaipuro que se conoce, el cual fue tallado en la piedra luego de su muerte y cuenta el relato de su última batalla ante el imperio español. Esta piedra guarda en ella la leyenda del Regreso de Guaicaipuro en algún momento.
Guaicaipuro fue un cacique de Venezuela mencionado por el escritor José de Oviedo y Baños, que popularmente se conoce como el cacique Guaicaipuro. Según la obra Historia de conquista y población de la provincia de Venezuela, este personaje nació en un asentamiento indígena en la región de Los Teques, Venezuela, alrededor de 1530, y murió en 1568. La obra de Oviedo y Baños dice que el personaje fue un nativo que lideró a varias tribus caribes, con el título Guapotori, “Jefe de jefes”, en una lucha por el control de las minas de oro de Los Teques.
Formó una coalición de gran alcance con diversas agrupaciones de la región central del país, especialmente en el Valle de Caracas, para hacer frente a la conquista española del territorio de la actual Venezuela. Allí adquirió el título de “jefe de jefes” o “Guapotori” dirigió a los caciques Tiuna, Naiguatá, Guaicamacuto, Chacao, Terepaima, Catia, Aramaipuro, Paramaconi y a su propio hijo Baruta, entre otros. En la actualidad Guacaipuro es uno de los caciques más famosos e ilustres, símbolo de la resistencia indígena.
Para las tribus que habitaron la zona de los Altos Mirandinos, al igual que para todas las culturas prehispánicas el sol es el padre mayor de la naturaleza, es el hombre, el centro del mundo es su Dios. Según la interpretación local este grabado representa al Sol de la Indianidad, el centro de todo, alrededor de él gira todo, es por ello que esta representación indígena del sol se encuentra en nuestra bandera municipal como el centro indiscutible de la naturaleza y la sociedad guaicaipureña.
Alrededor de este petroglifo ronda el misticismo, la fantasía y el romanticismo de las tribus de los Altos Mirandinos, así como en el imaginario colectivos de quienes hacen suyas las interpretaciones de las piedras de la Plaza Guaicaipuro, en Los Teques. Este tallado refleja a la Cacica Urquia o Diosa Upayi, la compañera del Gran Cacique Guaicaipuro, quien momentos antes de la muerte de este gran guerrero, arriesgo su vida junto a un grupo de mujeres para llevar el cuerpo del Cacique hacia las aguas del Rio Paraypa, actual Rio San Pedro, para sanar sus heridas. Pero fue muy tarde, Guaicaipuro estaba herido de muerte y Urquia con apoyo de su grupo de mujeres son las únicas que llegaron a conocer el lugar del descanso eterno del Gran Cacique, ya que los españoles estaban en busca de su cuerpo para desmembrarlo así como hicieron posteriormente con el Cacique Tamanaco, líder de las tribus Mariches y Quiriquires.