La fe y la devoción se desbordaron frente a la Catedral San Felipe Neri de Los Teques, donde la comunidad se congregó en una emotiva vigilia para vivir las horas previas y el inicio de la ceremonia de canonización en El Vaticano de José Gregorio Hernández, el “médico de los pobres”, y Carmen Rendiles, ejemplo de entrega y servicio.
Fieles de Los Teques se mantuvieron concentrados frente al templo, en un ambiente de profunda espiritualidad y alegría a la espera del momento histórico.
Asistentes como María Eugenia López, vecina de El Cabotaje, de 65 años, expresaron la inmensa alegría de la jornada, afirmando que ver a José Gregorio y a la Madre Carmen como santos es un milagro para Venezuela y un día de esperanza y paz para el país.
La jornada, cargada de fervor, fue destacada por el alcalde del municipio Guaicaipuro, Farith Fraija, presente en la actividad. “Hoy tendremos un amanecer de júbilo y alegría, hoy es un día de unidad”, expresó.
Además compartió su alegría y el valor de esta celebración como un “símbolo para exaltar la identidad solidaria, generosa y creyente del pueblo, que logró elevar a los altares a sus dos primeros santos”.
Agradeció al papa Francisco, quién poco tiempo antes de su muerte aprobó la canonización de los ahora santos, “por habernos dado al pueblo de Venezuela esta alegría y la satisfacción de ver un clamor popular ya un hecho concreto”.
Fraija, concluyó con un mensaje que resume el sentir de la capital mirandina: “¡Guaicaipuro tierra de fe!”.
Al amanecer, los fieles asistentes fueron la parte de la la misa dirigida por el papa León XIV y se sumaron en oración y agradecimiento por el vivir el momento que marca un hito en la historia de la Iglesia venezolana.
La canonización de estas dos figuras representa un acto de unión nacional y renovación espiritual. San José Gregorio Hernández y Santa Carmen Rendiles inspiran a millones de venezolanos y son el reflejo de la esperanza y la fe que caracteriza a la nación.




